domingo, 11 de mayo de 2008

mimbre

Si cada dia vuelvo al desierto ,y cada dia espero sentada, y en vez de arena veo cielo no me voy a poder engañar con promesas de regresos. Porque si espero sentada, no me aseguro mas que estar ahí dispuesta a esperar, y a encontrar mi nitidacertezacalma. Es que podria viajar y estar ya a una buena distancia de donde quiero estar ahora, pero sentada estoy y nada mas que yo en el desierto habitado. Aunque si no volviera al desierto en estas circunstancias, no estaria habitado y yo no estaria sentada. Esto sucederia tal vez si no me engañara con promesas de regresos mientras miro al cielo.Prefiero esperar